La habitación de Arles. V. Van Gogh. |
Hubo un tiempo
en el que quise escribir tanto que las palabras parecían no tener fin.
Un tiempo no muy
lejano en el que los versos, mal compuestos y sin rima, se asomaban a mi boca queriendo escapar
y plasmarse en algún lado. Un tiempo en el que los tumultos sociales y políticos,
en el que las cosas que nos ocurren, tenían un hueco reservado entre la t y la r
de mi teclado.
No sé si ese
tiempo se fue o pasó sin más. No sé si murió o lo mataron.
No sé. Tal vez,
simplemente, lo dejé pasar, como el tren que tantos poetas dejaron pasar en sus
canciones.
Es posible que
hayan pasado tantas cosas que al final no haya pasado absolutamente nada y mi
mente, hoy más cansada, necesite un cambio o un rumbo.
Es probable que
no debiera cuestionarme esto ahora pero el genio es así, caprichoso y
desobediente; aparece y desaparece como por arte de una magia en la que no
creo.
No sé si ese
tiempo se fue o pasó sin más. No sé si murió o lo mataron.
No sé por dónde
empezar para abarcar todos los retrasos que se me acumulan. La protesta
incansable del que lucha, la vergüenza obscena del gobernante, la tristeza del
que espera, la desesperación del que no sabe. Tantas cosas, insisto, han pasado, que parece que no haya pasado nada.
Y en mi pecho un
latido y una señal de alerta. Es tu
momento, me dice, sal y camina.
6 comentarios:
Sal y camina, denuncia y actúa, escribe y transmite.
Sé que el tiempo es reducido, y que a veces no queda ni un resquicio donde plantar una letra.
También sé que hay gente para lo que no está hecho el quedarse mirando.
Cuídate.
A veces hay que hacer un receso en el camino para seguir más tarde
A veces hay que hacer un receso en el camino para seguir más tarde
Descuida, Laura; arrógate a tu talento. Miras con genuino anhelo los asuntos a la fecha; intuyes con asombro que es tiempo de una nueva trenza.
Felicidades, amiga.
A veces se pierden las fuerzas pero no hay que dejarse vencer. Siempre hay cosas que contar y sobre las que escribir.
La única lucha que se pierde es la que se abandona. Ya lo sabes.
¡Un beso!
Gracias por vuestros comentarios tanto por aquí como por la página Facebook o por Twitter. Me habéis dado el empujoncito que necesitaba.
Abrazos fuertes.
Publicar un comentario